Hace unos meses cuando compartimos una nota sobre la cervecería Max Graf Brauerei, afincada en el balneario Parque del Plata, te contábamos la carga histórica de la familia Graf en la cervecería y su desembarco en Uruguay hace varias décadas, en la ciudad de Minas.

Fiel a sus orígenes, Max Graf, que captó la atención del mercado con su tradicional Weissebier, presentó hace poco su segundo estilo: una Märzen doble malta que ya podés probar en cada vez más bares de distintos puntos del país, y en los eventos primaverales, como en la Fiesta de la Cerveza Artesanal de Punta del Este que se realizará el sábado 2 de noviembre (iba a ser el sábado 12 de octubre pero se suspendió por mal tiempo).

Como su nombre indica, Märzen (Märzenbier) es la «cerveza de Marzo», elaborada en Baviera hace muchos años, cuando todavía no existían sistemas de refrigeración. En aquella época, las cervezas del norte de Europa no podían producirse después del mes de marzo, porque era ilegal. El calor convertía los tanques de fermentación en imanes para las bacterias y las cervezas se contaminaban. Por eso los cerveceros hacían su último lote en marzo.

Para mantener las cervezas frescas, las almacenaban dentro de barricas, en cuevas o en sótanos llenos de hielo. Cuando terminaba el verano y era seguro reanudar la elaboración, los cerveceros tenían que vaciar sus barriles para hacer espacio para las nuevas cervezas. Durante los meses de setiembre y octubre envasaban la cerveza de marzo, obteniendo un producto con un sabor intenso y maltoso pero muy equilibrado debido a los meses de maduración. De ahí que fuera la cerveza consumida tradicionalmente en la Oktoberfest.

La versión de Max Graf

Daniela González Graf, directora de Max Graf Brauerei, nos explica cómo hacen la Märzen en su planta de Parque del Plata. “Seguimos fieles a la ley de pureza alemana. La Märzen es una cerveza lager, de baja fermentación, con maltas caramelo (70% Malta Viena). La cerveza es de amargor medio a pesar del casi imperceptible lúpulo, y cremosa con espuma densa. Nuestra versión es muy bebible” dice.

Hacer esta cerveza lleva un mes de fermentación y por lo tanto es costosa, agrega Daniela. Al público le encantó y solo les queda un barril que se reservan para el Festival de Cervezas Artesanales de Punta del Este organizado por AMAU. Tomen nota porque vale la pena probarla.

En definitiva es una cerveza alemana lager, maltosa y elegante, con un sabor a pan y ligeramente a tostado. De amargor moderado y con un final seco que pide tomar otra.

Además es una cerveza que en su primer lote ya tuvo medalla. En la última edición de la Copa Uruguaya de Cervezas UYBeer, Max Graf obtuvo Medalla de Bronce en la Categoría Lager Styles Beer-Märzen.

Lo que se viene

Con el estímulo de las medallas (también obtuvo Medalla de Plata por su Weissenbier) están haciendo pruebas interesantes con frutas cítricas, aprovechando las recetas del abuelo de Daniela que trabajó en Compañía Salus. ¿Se acuerdan de la Citral y la Naranjita? Se vienen cosas por ahí.

Otra birra que está por salir a la cancha desde Parque del Plata es la Radler, con una fórmula heredada de la familia. Pero eso lo contaremos en otra nota.

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